TURISMO

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Otra Iglesia de Evangelio Eterno


"POR TANTO, ID Y HACED DISCÍPULOS A TODAS LAS NACIONES, BAUTIZÁNDOLOS EN EL NOMBRE DEL PADRE, Y DEL HIJO, Y DEL ESPÍRITU SANTO; ENSEÑÁNDOLES QUE GUARDEN TODAS LAS COSAS QUE OS HE MANDADO; Y HE AQUÍ YO ESTOY CON VOSOTROS TODOS LOS DÍAS, HASTA EL FIN DEL MUNDO. AMEN." MAT. 28.16

A pesar de que existe este mandato preciso e inequívoco de Jesús, mucha gente cree que el éxito está en tener riquezas, en tener la ropa más cara no necesariamente elegante, cree que el éxito es tener la casa más bonita, el carro más caro sin importar lo funcional o no que le pueda resultar; otros piensan que el éxito está en orillar este mandato de Cristo y está en ser famosos, populares, respetados y/o admirados y mientras más tienen más quieren, y hasta se avergüenzan de la condición que tienen.

Otros, los más peligrosos, son los que se afanan por el poder. Estos pretenden entronización en el poder y creen que manipulando y monitoriando las vidas de las personas harán historia y prevalecerán sobre los demás, pero los más indeseables de éstos, son los que buscan el poder para enriquecerse.

No es raro ver los nuevos millonarios de los gobiernos, o los que se presentan publicamente con vestuario estrafalario, o los que son capaces de venderse al diablo o a su propia madre para alcanzar riqueza.

Todos estos, abundan. !!!!

El éxito no es ni fama, ni poder ni riqueza. El éxito es piedad. Ser piadoso, compasivo, es tener amor a Dios y amar al prójimo.

Unos predican la piedad pero con prudencia, otros practicamos la piedad y la paciencia como infinitos.

Tener compasión del menesteroso, del débil, del abatido, no por pobre ni por débil ni por abatido, es lo que nos dará el verdadero contentamiento, el genuino gozo, está en Cristo, en una vida cristocéntrica, que le permita a Jesús hacer de nosotros lo que desee y concluya la obra maravillosa obra iniciada, para pasar a su presencia limpios, blancos, puros, venciendo al mundo y al pecado y que al final pueda decirnos: "siervo fiel y útil, entra en el gozo de tu Señor".

El éxito de los necios, los tercos será la eterna condena en el seol cara a cara con el abominable.